Discografía básica: The Pipettes - We Are The Pipettes

Hoy cumple 15 años 'We Are The Pipettes', el álbum debut de The Pipettes, la banda de mucho pop, bastante energía y la teoría de que los Beatles arruinaron todo. Esa era la visión, el curso del rock & roll hubiera sido diferente si la línea de las bandas de vocalistas hubiera predominado, no como influencia sino como una continuidad. 

Es su punto de partida para hacer música, adoptaron la imagen que tenían los grupos vocales femeninos en los 60, onda The Ronettes, The Supremes y Martha and the Vandellas. No se quedaron en la imagen, también adoptaron en su debut el clásico acompañamiento pop, el juego de voces en tono sumamente agudo, letras simples y que elocuentemente expresan las emociones de adolescentes entrando en otra etapa de diversión. 

El trío británico entendió perfectamente lo que amamos de la música pop: "Dance with me, it will be alright". La energía bailable es lo que mueve el disco,  un sonido contagioso que definitivamente recuerda a una era más inocente, pero con el giro a través de la influencia de The Carrie Nations, la banda ficticia de la película Beyond The Valley Dolls (1970).

Las integrantes de The Pipettes no llegaron solas, como ocurrió en la década de los 60, fueron acompañadas por el grupo masculino The Cassettes, músicos que raramente aparecen en entrevistas o fotos promocionales a pesar de su gran participación en el álbum, el objetivo era enfatizar el rol de las vocalistas. 

A pesar de esa impresión de que son un grupo pop, y lo que conlleva la menospreciada etiqueta, no hay razones para no tomarlas en serio, The Pipettes trata de hacer algo interesante y diferente a todo lo que escuchábamos en el 2006, a pesar de su clara relación con un pasado muy lejano. Es por eso que 'We Are The Pipettes' es el único disco pop que necesitas este año: 14 tracks en total, cada uno un potencial sencillo. El álbum es una pequeña dosis, media hora que se endulza sin empalagar demasiado. 

Aunque evoca la era dorada de los grupos de chicas, The Pipettes también se encarga de transmitir mensajes codificados de esta era, liberándolas de un posible robo de un museo dedicado al sonido Motown.