Mujeres de Culto IV: Lejos del nivel inicial

Para la década en cuestión, las mujeres ya no eran nada nuevo en el medio ni luchaban continuamente por obtener un reconocimiento, para eso ya les había tocado lo más rudo a las mujeres de los años anteriores (a las que ya citamos en otros números de ésta serie). Claro que no todo era tan fácil para la nueva generación, aunque les tocó en mayor medida tener la oportunidad de ser escuchadas sin tantos prejuicios, sin embargo era su turno para tratar de mantenerse, ganarse un lugar y no dejarse tragar por sonidos que pasan inmediatamente de moda sin aportar nada.

Aunque surgió a finales de los 80, Sinéad O'Connor poco a poco se colocó como una de las cantantes más controvertidas de los 90, gracias a su postura agresiva que se libró de los estereotipos de ser simplemente un objeto sexual. La búsqueda de O'Connor precisamente se basaba en ser tomada en cuenta como una artista seria.

Desde muy joven inició una carrera centrada en la música, a pesar de que en sus inicios interpretaba telegramas cantados. Su debut como profesional fue 'The Lion and the Cobra', sumamente exitoso en 1987 por sus sencillos 'Mandinka' y 'Troy'. Pero fue hasta su disco 'I Do Not Want What I Haven't Got' de 1990 que O'Connor alcanzó otro nivel. El primer sencillo del disco fue 'Nothing Compares 2 U', canción escrita por Prince que le brindó múltiples reconocimientos ese año y que la convirtió en personaje relevante. A este éxito se sumaron 'Am I Not Your Girl?' (1992), la excelente producción 'Univeral Mother' (1994) y 'Faith and Courage', su primer disco después de seis años de controversias y escándalos.

También desde las gradas de los 80, Tori Amos es una de las cantantes y compositoras que ha combinado exitosamente el rock alternativo de la década de los 90 con distintivas armonías de la década de los 70, además de revivir al piano como un instrumento apto para el rock. Gran fanática de Led Zepellin desde su adolescencia, Amos inicialmente buscó la fama como cantante de pop con el grupo Y Kant Tori Read, que editó un álbum homónimo y que fracasó estrepitosamente en 1987.

A este primer intento le siguieron dos EPs y una serie de conciertos que sin duda lograron asentar las bases para una exitosa trayectoria que ha producido cinco discos, pero su obra maestra continúa siendo su álbum debut 'Little Earthquakes' (1991), debido a su complejidad musical y lírica que logra una gran conexión con su vida, mucho más que sus siguientes producciones 'Crucify' (1992), 'Under The Pink' (1994), 'Boys for Pele' (1996) y ‘From The Choirgirl Hotel’ (1998).

Otra de las grandes cantantes de la década de los 90, que inició su trayectoria desde mucho antes de tener éxito como solista, es Björk, quien comenzó una tumultuosa carrera dentro de la escena musical en Islandia como solista infantil, con un álbum homónimo que fue un gran éxito en su país natal. Posteriormente se unió a grupos post-punk como Exodus, Jam 80, KULK y Sugar Cubes, agrupación con la que permaneció durante seis años.

Fue en 1992 con su segundo intento como solista titulado 'Debut' cuando Björk se convirtió en la revelación femenina del año gracias a los sencillos ‘Human Behaviour’, ‘Venus As a Boy’ y ‘Big Time Sensuality’. A este primer éxito le siguieron 'Post' (1995), el álbum de remixes 'Telegram' (1997), 'Homogenic', el soundtrack de la película 'Dancer In The Dark' titulado 'Selma Songs' (2000) y un reciente 'Vespertine', que sin duda la consagra como unos de esos duendes talentosos que cualquiera quisiera tener más cerca.

Una de las más grandes distinciones se la lleva Polly Jean Harvey, quien con su enorme honestidad, humor negro, capacidad vocal e interpretaciones teatrales ha logrado ubicarse como la más influyente de la década de los 90. Fue en 1991 cuando Polly formó un trío acompañada por Steve Vaughn y Robert Ellis, convirtiéndose en todo un suceso dentro de la escena independiente, rebasando ese límite con el lanzamiento de 'Dry' (1992).

Su primer intento fue superado por 'Rid Of Me' (1993), en cuya gira promocional se rompieron las relaciones entre Ellis, Vaughn y Harvey. En 1995 P.J. lanza su primer álbum como solista y tercero en su trayectoria titulado 'To Bring You My Love', que tuvo un éxito moderado, pero reafirmó a su favor a una gran legión de fieles seguidores, quienes fueron recompensados con 'Stories From The City, Stories From The Sea' (2000), considerado como toda una obra maestra y muestra del gran talento de Harvey.

Alguien que ha dejado huella en la historia de la música, ya sea por los escándalos a su alrededor, su agresiva forma de ser y vivir, y la influencia que indudablemente tuvo en el destino de Nirvana y su líder Kurt Cobain, sin duda es Courtney Love (odiada por muchos, detestada por otros más).

Love había tocado en varias bandas, incluyendo Faith No More y un pre-Babes in Toyland, antes de formar Hole en 1989, grupo con el que ha grabado tres discos: 'Pretty on the Inside' (1991), 'Live Through This' (1994) y 'Celebrity Skin' (1998). Desde 1998 no hemos escuchado nada nuevo de Love, ya que ha dedicado gran parte de su tiempo a su carrera como actriz, que inició en 1986 con la película 'Sid and Nancy'. Sin embargo aún habrá más de la vocalista, ya que Love prometió a principios del 2001 que regresaría con un nuevo proyecto, que hasta el momento lleva el nombre de Bastard.

Una de las cantantes y compositoras que no destacó comercialmente, pero que es considerada como una de las grandes heroínas independientes de los 90 es Ani DiFranco, quien se ha ubicado como una cantante de culto por muchos de sus fieles seguidores.

La prolífica DiFranco, solo basta decir que contaba con 100 composiciones originales a los 19 años, se ha negado a ser parte de las grandes compañías disqueras, por lo que creó su propio sello, Righteous Babe, a través del cual ha lanzado las diez producciones que componen su discografía, entre los que destacan 'Imperfectly' (1992), 'Out Of Range' (1994), 'Dilate' (1996) y el excelente 'Living In Clip' (1997), con el que demuestra su gran energía interpretativa.

De la misma forma, el éxito comercial no ha sido el fuerte de Diamanda Galás, pero eso no ha sido necesario para demostrar su talento y gran poder vocal, que sobrepasan las expectativas de cualquier amante de la música avant-garde. Galás inició su carrera en 1979, sin embargo su primera producción ‘The Litanies of Satan’ salió a la venta hasta 1982, a la que siguieron discos igual de impactantes como la trilogía ‘The Masque of the Red Death’, que se conforma de producciones independientes lanzadas entre 1986 y 1988 como ‘The Divine Punishment’, ‘Saint of the Pit’ y ‘You Must Be Certain of the Devil’.

A pesar de que su carrera ha abarcado casi tres décadas, Galás alcanzó el reconocimiento hasta los 90, cuando incursionó en otros géneros (entre ellos el pop el gospel) al igual que en la literatura, con la edición de su primer libro ‘The Shit of God’ en 1996. De cualquier manera Galás no abandonó su estilo colérico y desgarrador que la han hecho inconfundible, y en algunas ocasiones desconcertante.